Oficialmente todo vuelve a la normalidad, las calles vuelven a llenarse de gente con trajes y de escolares, las calles en horarios punta vuelven a tener tacos o alta afluencia de vehículos, de a poco el cielo azul-celeste típico del verano comienza a tomar tintes grisáceos, además del metro que vuelve a vomitar y vomitar gente en cada andén...
Para todo el mundo hoy, ya todo está en su lugar. Bajo esa premisa discutía respecto a donde estoy yo, si todo está en orden significa que estoy bien, pero como me gusta jugar al especial me doy cuenta que no.
Hace rato he vengo escuchando "consejos" de personas cercanas que me dicen que tengo que hacer (estudiar es el más repetitivo), la verdad gracias por lo que sigue cuando me incitan a hacerlo, pero no, no quiero estudiar, ya pasó mi tiempo (quizás nunca lo fue) de estudio, por culpa de esa intentona generé grandes deudas con cierta universidad, por culpa de esas deudas tuve que sacar dinero de muchos lados para pagarla y el resultante de estas deudas es que estoy debiendo muchísimo dinero, estar en DICOM y por el sueldo promedio de un tipo como yo, significaría ya por lo menos unos 5 años de trabajar para pagarlo todo... Entonces de ahí viene la decisión de no pagar nada y tampoco estudiar, o sea que con lo poco que se tenga es pasarlo bien como única premisa.
No me importa mucho si no lo entienden, la verdad es que es la mejor forma de verlo, el otro día una amiga me preguntó: "Con todo eso que estás pasando cómo lo haces para no amargarte?"- a lo que respondí: "O sea si me amargo se acabarán mis deudas?"- su silencio posterior me dio la razón.
Una y mil noches salgo por ahí a beber algunas copas con amigos y amigas, vagando de bar en bar o lugares para ir a bailar y distender un poco los músculos (que a esta altura solo se ejercitan cuando juegan fútbol) muchos litros de alcohol, buena compañía y la nunca bien ponderada admiración de extrañas a este ser: entre atractivo (soy muy guapo) y atrevido (sí, les reviento el globo sin asco a cualquiera, por muy guapa que sea).
A todo esto vamos a por unas pilsen? o quizás algún trago más fuerte, ya que en el fondo las "sustancia" a beber da exactamente lo mismo, lo que importa realmente es la conversación, la compañía y los resultados de ideas expuestas en la absoluta libertad mental bajo los efectos del alcohol.
Por cierto llevo años pasándola muy bien, pretendo seguir así, estos años han sido los más divertidos de mi vida y pretendo extenderlos lo más que se pueda, ya no hay vuelta atrás y sí, sigo jugando a ser especial y por eso prefiero ser "El Don Nadie más Cool que conozco" (gracias por esa calificación) o ser en efecto "Un Decadente con Estilo", mucho mejor que un profesional del montón.










P.S: Casi todo personal...